¿Nació Jesús realmente de una virgen? 

Desde una perspectiva humana, a menudo se ha atribuido a líderes importantes el haber nacido de vírgenes. Numerosos líderes religiosos a lo largo de la historia tienen un relato similar de su nacimiento.

Dios suele actuar a través de procesos naturales y de las leyes de la ciencia que él mismo estableció. A través de la evolución del matrimonio, el ideal preconizado por el avance de la civilización es que un hombre y una mujer se enamoren, se casen y tengan hijos. Esto es lo que hicieron José y María. María era virgen, conoció a José, se casaron y tuvieron nueve hijos. Su primogénito fue Jesús. Vino al mundo a través del proceso biológico normal, como sus hermanos y cualquier otro bebé.

Sin embargo, este bebé era único. Era plenamente humano, pero también plenamente divino. El Hijo de Dios del universo se encarnó en este bebé. No fue el resultado de un proceso natural, sino un auténtico milagro, y sólo Dios sabe cómo se produjo. El misterio de la encarnación de la Deidad en la forma humana de Jesús, por lo demás de origen natural en el mundo, sigue sin resolverse.

Los seres humanos y los animales nacen. Los seres divinos son creados. Para que un ser divino se convierta en humano, debe ocurrir algo sobrenatural. A lo largo de la historia, la idea de que una virgen dé a luz a un Dios sugiere que algo tuvo que hacerse de forma diferente.

En nuestros corazones hay un anhelo instintivo de ayuda de lo alto y de lo alto. Es natural que envolvamos a los líderes humanos con leyendas de orígenes sobrenaturales y carreras milagrosas. Muchas razas han concebido a sus grandes como nacidos de vírgenes, sus carreras plagadas de episodios milagrosos y la expectativa de que regresen. Esta leyenda incluye a Gengis Kan, Buda, Mahoma, Hesunanín Onamonalonton y Marduk, y se remonta hasta Adán.

Desde el principio de la religión, los profetas han predicho que su Santo nacería de una virgen. La mayoría de estos grandes Hijos de Dios de las religiones del mundo solían nacer en una cueva y normalmente de una madre virgen. Lo mismo ocurre con los dioses mitológicos, como Baco, Mercurio y Adonis.

La mayoría de los escritores del Nuevo Testamento no se basaron en esta teoría para demostrar la divinidad de Jesús. Sólo los Evangelios de Mateo y Lucas mencionan un nacimiento virginal; no se menciona en las Epístolas, los Evangelios de Marcos y Juan, ni en el Apocalipsis. Pablo describe a Jesús como "hecho de la simiente de David según la carne", lo que se refiere a un linaje humano.

La mayoría de las profecías mesiánicas del Antiguo Testamento fueron modificadas para aplicarse a Jesús mucho después de su vida en la tierra. En la profecía de Isaías, "He aquí que la virgen concebirá...", la palabra original doncella fue cambiada por virgen.

La encantadora narración de María que se adhiere a la teoría del parto de una virgen fue aceptada por la mayoría de las iglesias cristianas en el siglo II e incluye la virginidad perpetua, con Jesús como hijo único.